Según apoderados, el portafolio de marcas premium quedaría concentrado en manos de Bavaria.
El aval de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) a los efectos locales de la integración de la cervecera AB InBev y la sudafricana SABMiller –dueña de Bavaria y Cervunión, entre otras firmas colombianas– desató una polémica empresarial.
La SIC impuso, entre otros condicionamientos, la presentación, por parte de Bavaria, durante los próximos 5 años, de reportes periódicos sobre la inversión en publicidad, discriminados por marca y medio de comunicación.
La SIC consideró queSABMiller, con cerca del 98 por ciento del mercado cervecero local, ya ostentaba una posición de dominio, previa a la concentración económica de dichas firmas.
Según la resolución 24.329 del 2016, la SIC oyó las objeciones de la Central Cervecera de Colombia (CCC), que es un joint venture de la chilena CCU y Postobón.
“Esta Superintendencia considera que existe un agente (CCC) con la suficiente capacidad financiera y con una red de distribución sólida y posicionada a lo largo y ancho del país, que le otorgaría un poder significativo para contrarrestar restricciones”, añade en la disposición
Jairo Rubio Escobar, exsuperintendente de Industria y Comercio y apoderado de CCC, dice, por el contrario, que aunque comparten en su integridad los argumentos de la SIC, el portafolio de marcas premium queda en manos de una sola compañía (Bavaria).
“El condicionamiento no es tal porque no restablece la competencia y son exigencias de simples reportes de información”, agrega.
El abogado añade que aunque la participación total de mercado de Bavaria se eleva menos de 0,5 puntos porcentuales, en los segmentos premium y popular sube, respectivamente, 4 y 0,4 por ciento. Por tanto, según agrega el jurista, CCC insistirá en revocar la resolución, y en su lugar proferir una que objete la integración. La empresa nacional también pidió modificar el condicionamiento por uno que restablezca efectivamente la competencia en el sector.
Fuente: ElTiempo.com